Luces de neón

Históricamente la ciudad ha sido un atractor por su capacidad de generar riqueza, por su demanda de mano de obra. Esta dinámica de crecimiento urbano se ha mantenido hasta bien entrado el SXX, donde esta lógica se ha roto y la urbanización de las grandes metrópolis se ha desligado de su capacidad de generar empleo.

"luces de neón"

Lejos del glamour, las ciudades en el Sur global se convierten en grandes monstruos, contenedores humanos cuyo crecimiento escapa a cualquier lógica, ciudades en evidente recesión, no dejan de crecer a ritmos de 8 a 15% interanual (The Challenge of Slums, UN-HABITAT).

Dharavi, Kinshasa, Dacca, Lagos o Nairobi, ofrecen una realidad que nos es lejana, espacial y conceptualmente, pero no por ello tenemos que dejar de plantearnos que es lo que estamos haciendo para que la vida de esas personas sea indiferente a la gran minoría de la población poderosa. 

La ciudad ya nada tiene que ver con la condición humana de prosperar laboral o personalmente, su crecimiento se ha desligado de su capacidad de generar empleo. Se ha convertido en un simple atractor donde las personas donde ,al igual que las moscas van /a la miel/ a la mierda o son fascinadas por el centelleo de la luz azul que las conduce a su final], las personas son empujadas por un impulso superior a su capacidad de raciocinio a las urbes. 

Slum en Dacca

El objeto de estas líneas es el de hablar de las ciudades que crecen a un ritmo descontrolado, en las que se desarrollan guetos de áreas hiperdegradas, donde la vida no es más que un ejercicio de supervivencia. Africa, Sudeste Asiático y en menor medida América Latina, China o los países satélites de la URRSS, tienen que hacer frente a una crisis habitacional sin precedentes. 

El Manchester de Dickens, Dublín o Nápoles en el S XIX, podrían servir para introducir la vida en estos Slums Modernos, pero la capacidad involutiva del Ser Humano es fascinante, y aquellos barrios de ladrillo azabache y calles hediondas han sido superados por auténticos vertederos humanos.

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Si Constant imaginaba una Nueva Babilonia en el que el hombre ha sido liberado de aquello que le ata al sistema, yo propongo un mundo en el que macrodatos como GINI se acerquen a cero, en el que un mercado global no condene a las tres cuartas partes de la población a vivir en la miseria, en el que no me sienta culpable sabiendo que mi statu quo solo se entiende por la realidad de una economía neoliberal en la que tengo el privilegio de estar en el tercio superior de la pirámide. 

"New Babylon"

Lejos de hipocresías,sé que la igualdad entre sociedades no sobrevendrá, pero si es un horizonte deseable hacia el que empezar a caminar desde el momento mismo en el que se es consciente de la realidad de un mundo tremendamente injusto e inmoral, casi odioso.